SOLICITUD

Seguridad Alimentaria: ¿Es suficiente un detector de metales?

Aquellos que utilizan un detector de metales para inspeccionar objetos extraños en los alimentos corren el riesgo de pasar por alto muchas amenazas en materia de seguridad alimentaria. Los fabricantes de la industria alimentaria se pueden asegurar de que esto no ocurra con el equipo HEUFT eXaminer XB: el nuevo equipo que inspecciona de arriba abajo, ofreciendo la máxima fiabilidad en cuanto a detección, y cuya inspección va mucho más allá que la mera identificación de contaminación por metales.

El fin de sistemas en línea  para la inspección específica de objetos extraños es indispensable, cuando se está produciendo y envasando alimentos. El riesgo del producto lo exige por sí mismo. El fabricante de alimentos también se encuentra en una situación difícil en materia de certificación, de acuerdo con la International Food Standard (IFS), en el caso de que no tome todas las medidas necesarias con el fin de evitar la contaminación del producto final. Por tanto, la gestión integral de cuerpos extraños es una necesidad, se trata de uno de los criterios KO para IFS. Se establece un análisis de riesgo, así como aquellas medidas de prevención efectivas que se deducen de éste. En muchos casos el resultado se traduce en que el uso de detectores de metal convencionales no es suficiente.
Esto se debe a que las partículas de vidrio, trozos de madera, piedras, objetos extraños fabricados de PTFE y plástico, con frecuencia también presentan una amenaza en el caso de la seguridad alimentaria. En este caso un sistema por Rayos X para la detección de metal así como la contaminación no metálica sería la alternativa más inteligente. Un nuevo tipo de inspector vertical hacia abajo ya está disponible para ello: el equipo HEUFT eXaminer XB.

 

Más que una inspección de metal

 

Desde tabletas de chocolate, chocolatinas a queso y rodajas de pan, ya sea a granel o en paquetes, envases termoformados, bolsas o paquetes compuestos: el sistema está especialmente desarrollado para realizar un seguimiento continuo en cuanto a la calidad e inocuidad de los alimentos sólidos transportados por una cinta transportadora. Se inspeccionan hasta 1.000 productos por minuto, y no sólo detecta la contaminación por metales, sino también objetos extraños fabricados en  otros materiales. Además es posible comprobar la totalidad e integridad de los productos. La única medición de pulso de Rayos X para el examinador HEUFT eXaminer XB se  activará cuando el producto se encuentre en el área de inspección. El dispositivo emite tan solo un destello que dura una milésima de segundo, en lugar de un haz continuo. El resultado: fotografías nítidas del producto al completo en una exposición a radiaciones extremadamente baja. Las tecnologías integradas de evaluación de imagen garantizan valores máximos en cuanto a precisión en la inspección así como cantidad de falsos rechazos.

 

Rendimiento de Inspección sin Restricciones

 

El sistema HEUFT es superior al resto de soluciones comunes, incluso cuando el análisis de riesgos IFS requiera simplemente que el metal de objetos extraños tenga que ser localizado. Esto se debe a la señal liberada por el producto, debido a que la proporción de sal o ácido existente en el producto no da lugar a un efecto negativo en la inspección en cualquiera de los casos. Dado que este efecto en el producto puede restringir la inspección de fiabilidad de una forma considerable en el caso de los inspectores clásicos de metal, éste no afecta al funcionamiento de dicho dispositivo en el caso del equipo HEUFT eXaminer XB.  El embalaje de los componentes de metal tales como el  foil apenas restringen el resultado de la inspección. Desafortunadamente este caso sería totalmente diferente en el caso de los detectores de metal: los objetos extraños pequeños en estas condiciones, no son identificados de forma frecuente y en el peor de los casos sólo se detectaría acero magnético y no acero inoxidable.

 

Trazabilidad y APPCC (HACCP)

 

El sistema APPCC y la trazabilidad mediante criterio KO desempeñan un papel decisivo en la certificación IFS, además de la gestión de objetos extraños. Los llamados Puntos Críticos de Gestión (CCPs), así como los detectores de objetos extraños requieren un monitoreo continuo además de documentación.
El equipo HEUFT eXaminer XB cumple con estos requisitos de forma específica, de forma que se realiza dicho seguimiento de forma específica para cada producto con el fin de ser examinados a través del dispositivo al completo, esto excluye el peligro de que uno de estos productos no se compruebe por error. La verificación de rechazo asegura que los productos defectuosos sean realmente rechazados. El sistema comprueba su propia capacidad de inspección en intervalos regulares, intervalos libremente configurables, utilizando programas de inspección especiales. La información referente a las funciones defectuosas que hayan sido diagnosticadas en el transcurso del test, se pueden almacenar en el sistema, así como aquellas imágenes de detección de aquellos productos que han sido identificados como defectuosos. Esta información tan importante puede ser recuperada en cualquier momento desde el propio dispositivo, o bien desde cada uno de los PC de la oficina que estén conectados a la red. La interfaz gráfica de usuario multilingüe HEUFT PILOT, con herramientas integradas como auxiliar de funcionamiento, hace que el inspector de objetos extraños compacto sea comprensible de una forma totalmente intuitivo. La conexión a un sistema de producción de adquisición de datos es tan posible como el servicio remoto a través del HEUFT TeleService.

 

Gestión integral de objetos extraños

Aquellos que deseen cumplir con los requerimientos de IFS y garantizar la máxima seguridad en sus productos han acertado en su totalidad con el equipo HEUFT eXaminer XB. Con este equipo se realiza una gestión del posible objeto extraño, lo que supera con creces la sola detección del metal puro, ya que identifica una gran variedad de tipos de contaminación, además de proporcionar variedad en documentación para archivo de funciones, independientemente de que nos refiramos a producto o embalaje.